lunes, 5 de septiembre de 2016

LA FUENTE DE ORO / JUAN PEDRO COSANO


Sinopsis:

Una sociedad tan opulenta como hermética. Un amor que desafi ó las convenciones. Un Downton Abbey a la española.

Jerez de la Frontera, años treinta: Juan Pedro Cosano, extraordinario conocedor de la ciudad, ofrece una novela con aliento épico y aires del melodrama más clásico. Sus protagonistas son el carismático Beltrán de la Riva, heredero de una de las sagas de bodegueros más importantes, y Lele Gavilán, una muchacha de extracción humilde y extraordinaria belleza. Los dos jóvenes son víctimas de un fl echazo que les arrastra a una pasión prohibida, a un destino que, atendiendo a su época, parece tener sus capítulos ya escritos: Beltrán puede permitirse tener una amante a la vez que está prometido con una aristócrata de rancia alcurnia, mientras que Lele está condenada a una vida de mantenida de lujo.

Sin embargo, de forma insospechada el curso de los acontecimientos dará un giro inesperado, movido por el viento a la historia y sus dramáticas circunstancias pero, sobre todo, por causa del carácter indomable y gentil de Lele.

La opinión de la Mari Mari.

No estaba segura si iba ser capaz de acabar el libro sin empezar esta reseña, porque se me ha metido tanto bajo la piel esta historia, que había ratos que necesitaba un desahogo. Pero al final desistí, ya que tampoco podía dejar el libro a un lado, ponerme a escribir, y dejar lo que estaba por pasar entre sus hojas cerradas.

Cuando acabé mi anterior lectura y estaba apostando por el candidato ideal para acompañarme en los días sucesivos, me llego un mensaje de una amiga, ávida lectora, de hecho la conocí a través de esta gran pasión, la lectura, me dijo que estaba leyendo un libro buenísimo y que mientras lo leía no podía evitar acordarse de mí, sabiendo, conociéndome bien, que sería un libro que me iba a gustar, mano de Amazon rapidamente y al lio.

Yyyyyyyy Ayyyyyy ¡¡Madre mía del amor hermoso!! Decir que me ha gustado es quedarse corta, cortísima.

Saltar al corazón de esta maravillosa novela es lo mejor que me ha pasado en lo que va de año, una historia que introduce todos los ingredientes necesarios para ser una lectura altamente apasionante, adictiva, historica y romántica a partes iguales, los años mas convulsos de la historia política de España del siglo pasado, las primeras luchas obreras, las diferentes clases sociales con sus respectivas realidades, y una historia de amor tormentosa entre dos clases sociales tan distintas y lejos la una de la otra como el sol de la tierra.

Esta historia esta relatada por partes, cuatro en total, cada parte lleva un titulo y después está fragmentado por capítulos con su correspondiente titulo, estas partes transcurren entre 1929 y 1940, por lo tanto, con estas fechas ya vistas de antemano, podemos hacernos una idea en la época por la que van a transitar la historia y nuestros protagonistas.

Haciendo un repaso histórico, contundente, sin llegar a ser tedioso ni soporífero en ningún momento, el escritor, nos trasladara a una época convulsa y a los acontecimientos que desencadenaron una guerra atroz donde el país quedo dividido en dos, luchando hermanos contra hermanos.

Empezando el relato de los hechos históricos con la dimisión de Primo de Rivera, seguiremos con la abdicación del rey Alfonso XIII y su posterior exilio, después de unas elecciones ganadas por la república, las primeras luchas obreras por un salario y unas condiciones de trabajo dignas, las primeras mesas de negociaciones entre patronal y sindicatos, el enardecimiento en la quema de iglesias y el porqué, que tan claramente se nos expone, el golpe de estado de los fascistas, los abusos de poder, los fusilamientos…, en fin, que no se le queda nada en el tintero, pero no te agobia, no se extiende más de lo meramente necesario para centrarnos en la época que nos narra.

Y gracias a la historia paralela a estos sucesos que se nos cuenta, asistiremos a las fiestas que celebraban los sindicatos, oiremos los primeros mítines obreros, a las primeras huelgas, y a las primeras reuniones entre la patronal y los sindicatos de trabajadores, donde palparemos la tensión del momento, las negociaciones, el tira y afloja entre unos y otros, las concesiones, las negaciones, los acuerdos…

Este es un tema delicado, y del que sinceramente he disfrutado, y me he identificado al 100% en valores e ideas, aunque no tanto en las formas, pero claramente era la época en que aconteció y las pocas salidas pacíficas que había.




Para que el lector pueda hacerse una idea de los dos distintos mundos de esta sociedad dividida entre ricos y pobres, el escritor nos narra la apasionante y desgarradora historia de amor entre dos personas que provienen de estos dos mundos opuestos, que nunca deberían haber puesto los ojos el uno en el otro.




Asistiremos a los primeros tiempos de Beltrán, nuestro seductor protagonista, libertino, despreocupado, malgastador, aprovechado, ¿por qué no decirlo? Fornicador, con una vida disoluta. Que sin embargo deberá madurar repentinamente teniendo que hacerse cargo del negocio familiar, convirtiéndolo en un destacable hombre de negocios, manipulador, extorsionador, perspicaz, egoísta, con una vida aparentemente ordenada, que sin embargo dista mucho de serlo.

Un hombre muy pagado y seguro de sí mismo, con un fuerte carácter, que todo lo tiene, que de todo se aprovecha, y que descuida lo que nunca se debe dar por hecho, para terminar preguntándose y dándose cuenta de algo fundamental ¿de qué te sirven todos tus bienes y riquezas si no hay con quien compartirlo?

La parte femenina protagonista se llama Mercedes Gavilán, comúnmente llamada Lele, una muchacha de condición humilde, que en una Nochevieja cruzara sus hermosos ojos negros con los igualmente hermosos verdes de él, y que después de varios años, y teniendo una vida humildemente encauzada, profesional y sentimentalmente, pondrá su vida del revés cuando de nuevo sus miradas se vuelvan a encontrar para cambiar el curso de su vida.

"El amor es como una estampía, como el galope de un caballo, como el toro cuando sale a la plaza”

Los protagonistas son altamente adictivos desde el primer momento que entran en escena, cada uno con su vida por separado nos atrapan en sus experiencias, en las vidas que ellos creen destinados a vivir, con Lele viviremos la primera ilusión en el amor, las humillaciones de los patronos a sus trabajadores, la incertidumbre por lo que pasa políticamente sin llegar a entenderlo realmente, el amor prohibido que pone su mundo del revés, entraremos de su mano por sus pesares más intimos, sobre todo lo perdido por el amor de un hombre que no es enteramente de ella, a Lele no le llena el lujo en el que vive, le podrá la soledad de haber perdido a su familia el día que perdió la honra, y es que a la mujer como bien manifiesta Beltrán en una conversación, no voy a revelar con quien…

“Soy un hombre, y bien sabes que a los hombres todo se les excusa. Tú, por el contrario, eres una mujer, y a la mujer se les exige lo que al hombre ni siquiera se le sugiere.”

Lele nos hará estar con el corazón en un puño compartiendo su sufrimiento con el lector, el sufrimiento que conlleva la soledad, la añoranza del hogar, de lo que podría haber sido su vida, de lo feliz que se siente las horas robadas que pasa junto al hombre que ama más allá de la razón, para luego invadirla de nuevo el temido aislamiento. Nos llevara por los derroteros de su mente, las decisiones que no toma, las que si por lealtades arraigadas por la falta, por el ayer perdido, el perdón que ansia para estar en paz con ella misma, y que la llevara a plantearse su vida e intentar cambiarla.

Con Beltrán me pasó justo lo contrario, me parecía un amoral, pendenciero, un egoísta ególatra que solo mira por él, que nada le importan los sentimientos de los demás si con ellos se derrumba su castillo de cristal, que poco o nada le preocupan sus trabajadores si no es por sacar la producción de su bodega y por ello obra en consecuencia.
El todo de uno, por el nada del otro, la soberbia por la humildad.
Y como bien dice el dicho “No sabe valorar lo que tiene hasta que lo pierde”

“A la postre, tuvo que admitir que la había perdido, y se acostumbro a vivir con ese dolor sordo que le latía constantemente en las raíces del alma”

Y es entonces cuando empiezas a cogerle cariño, cuando sabes de su sufrimiento, cuando se da cuenta de las cosas que verdaderamente importan, que el poder y el dinero pierden su fuerza y se diluyen cuando el corazón llora ausencias.

Como ya habréis podido vislumbrar, los protagonistas están muy bien definidos, al igual que todos los secundarios, todos siguiendo los patrones de la vida de la época y lo que se esperaba de cada uno, obrándose en consecuencia, hay personajes que enamoran, que duelen, que no comprendes, hay que el orgullo le puede, que las ideas las lleva hasta las últimas consecuencias, hay que son repugnantes, que te dan mala espina, y que al final acaba gustándote hasta darle infinidad de veces las gracias, hay quien ni te gusta al principio ni al final…Personajes los hay para todos los gustos.

Quisiera por último hablar de la magnífica narración en tercera persona, impecable, fluida, apasionada, con un lenguaje muy cuidado. Es una narración que contiene fuerza en todas sus vertientes, desde la elegida época en la que es situada con sus históricos acontecimientos, la fiel reproducción de la moral de la época, hasta la historia de amor de nuestros protagonistas, donde sientes en todo momento toda clase de sentimientos, desde el más bueno, hasta el más malo, y es que su escritor enardece la lectura hasta lograr meterte dentro de ella, y situarte en la piel de los protagonistas, sobre todo de Lele.

Es una lectura que fluye ascendentemente, en ningún momento declina el argumento, es toda una vorágine de sucesos, situaciones, decisiones…etc. que hace que sea imposible dejar de leer, yo tenía el libro adherido a la mano. Los sentimientos que te provocan hace que en algunas ocasiones se te ponga un nudo en la garganta y ahogues las ganas de llorar, o gritar todas las injusticias que la época llevaba, desde las sociales, políticas, y hasta las machistas, donde ni tu propia familia podía apoyarte, todo un sin sentido.

Es una narración compleja, ya que debe retratar fielmente tan distintas clases sociales y sus distintas realidades.

Contiene una prosa evocadora que te hace viajar en el tiempo y pasear por las calles de Jerez, saborear y oler sabores y olores perdidos por el paso del tiempo, dichos antiguos que han quedado igualmente en desuso, pero que algunos los he recordado en boca de mis mayores, trasladándome a mi más tierna infancia.



                                               

Por ir acabando ya, solamente me queda por decir que si no lo leéis, no sabéis lo que os estáis perdiendo, y si lo hacéis, seguro que os pasa como a mí, que quería acabarlo y a la vez me aterraba la idea de terminar el libro que más me ha gustado en lo que va de año.

Así que no os lo penséis tanto que una vez lo empecéis, seguro que no lo dejáis hasta el final, porque la historia se te habrá metido bajo la piel, como me sucedió a mí.

Por si estais interesados aquí os dejo enlace para coprar, no os lo penseis que merece muy mucho la pena, palabra de la Mari Mari.